Prosiguen las reuniones
Justo un mes y un día después de las elecciones, el PNV, EA, EB y Aralar celebraron ayer el primer encuentro a cuatro bandas para tratar de llegar a un acuerdo para gobernar la Diputación de Gipuzkoa. A una semana del pleno en el que se designará al sucesor de Joxe Joan Gonzalez de Txabarri, los cuatro partidos se mostraron dispuestos a limar asperezas y crear una entente para dirigir unidos el territorio, aunque admitieron que en su primera toma de contacto han constatado importantes diferencias programáticas.
De momento, el socio más convencido de este posible cuatripartito sigue siendo el PNV, mientras que EA y EB-Aralar tratan de reconstruir los puentes rotos tras mostrar públicamente su desconfianza mutua y sus diferencias.
El encuentro se prolongó dos horas y media y al mismo asistieron Joseba Egibar por parte del PNV, Iñaki Galdos por EA, Antton Karrera por EB y Ernesto Merino por Aralar, entre otros dirigentes.
Fuentes del PNV aseguraron que, pese a las tensiones previas, la cita se desarrolló en "un ambiente correcto". Tras esta toma de contacto, los jeltzales confían en acercar posiciones en un próximo encuentro, que podría celebrarse el lunes. Galdos, por su parte, aseguró que en la reunión se "constataron las diferencias programáticas" que existen con EB-Aralar aunque no descartó que se puedan superar si la coalición "flexibiliza" su tajante oposición a infraestructuras que su partido y el PNV consideran clave.
Los cuatro partidos trataron de aclarar los malentendidos que han marcado sus relaciones en las últimas semanas y pusieron sobre la mesa las espinosas situaciones en las que se han escenificado sus diferencias, como los plenos de constitución de los ayuntamientos de Zumaia y Azpeitia en los votos de EA, EB y Aralar sirvieron para arrebatar sendas alcaldías al PNV.
"Hemos tenido la oportunidad de dar explicaciones y aclarar las interpretaciones equivocadas que se han producido estos días", indicó Antton Karrera. Consciente de que los cuatro junteros de su partido pueden dar la llave del gobierno foral tanto al PNV, con los votos de EA, como al PSE, previo apoyo del PP, el líder de EB reconoció que las diferencias programáticas que tienen con sus pretendientes complican el acuerdo. "Nos advierten de que en la oposición hace mucho frío, pero no entraremos en un gobierno que no nos acabe de convencer", comentó.
Karrera aseguró que de momento no han mantenido ningún encuentro con el PSE-EE a pesar de que los socialistas han mostrado interés por reunirse con ellos. La próxima semana es posible que se produzca una toma de contacto entre ambos partidos, aunque para EB la prioridad sigue siendo el tripartito, que según el líder de la formación, Javier Madrazo, es una fórmula que "tiene pasado, pero sobre todo tiene presente y futuro, un futuro que hay que situarlo más allá de 2009", declaró ayer.
Desde Aralar, Ernesto Merino destacó el ambiente "cordial" en el que se desarrolló la reunión, tras la que consideró que "la pelota ha quedado en el tejado de PNV y EA". "Nosotros, como coalición EB-Aralar, hemos puesto sobre la mesa un documento en el que planteamos nuestros requisitos, y en la medida que veamos voluntad en estos partidos de asumir parte de ellos votaremos en un sentido u en otro. En sus manos está desatascar la situación", apuntó.
Merino insistió en que un buen compromiso en materia de fiscalidad, servicios sociales y transporte público, así como la voluntad de hacer una consulta popular sobre la incineradora y una posición neutra ante infraestructuras que dependen del Estado, como el TAV, sería "un buen aliciente" para que EB-Aralar inclinara su voto hacia PNV y EA. "Buscamos lo que creemos que la sociedad ha demandado en las urnas: un gobierno aber-tzale con contenidos programáticos progresistas", añadió.
Mientras que esta coalición se presenta como un hueso duro de roer, las que van muy avanzadas son las negociaciones entre PNV y EA. Según señaló ayer Galdos, el apoyo de los siete junteros de su partido a los jeltzales para que Markel Olano se convierta en el próximo diputado general sólo está pendiente de cerrar algunos "flecos", como el modo de enfocar la reforma del Impuesto de Sociedades.
EA acabará de deshojar la margarita el lunes, cuando la Ejecutiva Regional decidirá, previa consulta a la Asamblea territorial del partido, si confirma su apoyo al PNV o se decanta por la generosa oferta del PSE-EE, que se ha comprometido a ceder a este partido la mitad de las carteras si se opta por ellos. Galdos agradeció la "paciencia y lealtad" mostrada por los socialistas a pesar de que EA ha establecido una línea prioritaria de negociación con el PNV.
Los socialistas no están dispuestos a quedarse de brazos cruzados mientras los socios del tripartito tratan de reeditar esta fórmula. De hecho, Miguel Buen ya advirtió de que si esta semana no tiene noticias de EA iniciará contactos con otras formaciones para conformar una mayoría capaz de hacer frente a que trata de componer el PNV.