Otro año en Segunda supondría que la metástasis de la Real fuera irreversible

Entrevista a Iñaki Badiola en Diario Vasco.

-La gente está oyendo hablar de un grupo inversor chino, pero ¿qué es Lighthouse Consulting Limited?

- Lighthouse es una empresa radicada en Hong Kong y China que se dedica fundamentalmente a la toma de participaciones en empresas industriales chinas, líderes en sus sectores, con el objetivo de modernizarlas, internacionalizarlas, ayudarlas a crecer tecnológicamente y facilitar el proceso de su salida a Bolsa. De igual manera asesoramos en procesos de fusiones y adquisiciones en ese país. Todos nosotros llevamos en banca de inversión veinte años, siempre en bancos extranjeros y en el Grupo Santander. Conocemos muy bien China y somos unos absolutos convencidos de que China es el futuro.

- Pero hablamos de fútbol, de la Real Sociedad y no de empresas al uso.

- Claro... El hecho de que el fútbol allí esté pegando muy fuerte nos llevó primero a tratar de entender y analizar el potencial que China y Japón tienen en este deporte y posteriormente a realizar inversiones en este sector. Consideramos que sería una buena idea que todo ese potencial que en China está explotando lo canalizáramos hacia la Real para realizar una serie de inversiones. Por eso contactamos con el Consejo en febrero del 2006 para exponerles nuestras ideas.

- ¿Y por qué la Real Sociedad y no el Betis, por ejemplo?

- Es una cuestión sentimental. Yo estoy a la cabeza de Lighthouse Consulting Limited y por eso, de alguna manera, puedo dirigir los proyectos en un sentido u otro. La Real es mi equipo de toda la vida, y ese sentimiento muy pocos aficionados de otros equipos pueden saber lo que supone y representa. Creo que somos algo muy pero que muy especial. ¿A quién no le gustaría si dispusiera de los mecanismos y las herramientas necesarias ayudar a su provincia, a su ciudad, a su equipo de toda la vida a salir de una situación de deriva como en la que actualmente nos encontramos ? Te contaré una anécdota, mi aita, que ahora está muy enfermo, me enviaba por fax cada lunes a Australia y China los resultados de la liga y la crónica de la Real de tu diario. En aquel tiempo no existía internet y recuerdo que para mí era como sentirme en casa.

- ¿Y creen que la Real puede ser rentable económicamente hablando?

-Lo que creemos es que la Real necesita fundamentalmente tres cosas. La más importante y en la que la gente se fija menos, es la de dotarle de nuevas fuentes de ingresos. Un equipo del tamaño que hoy tiene la Real ya no puede ser rentable sustentándose exclusivamente en un modelo basado en merchandising local, derechos televisivos e ingresos por abonados. Imposible.

- ¿La segunda?

- La segunda es la gestión. Aquí la Real de los últimos años ha fracasado estrepitosamente, porque el fútbol desafortunadamente es una mezcla explosiva de gestión deportiva y financiera. Hemos bajado a Segunda y las cuentas del club se encuentran en una situación difícil. Y la tercera, que es en la que más se fija la gente, es la menos importante: el dinero.

- No me diga.

- El dinero puede venir de cualquier lado, es del mismo color venga de donde venga. Nos sorprendían declaraciones que leíamos el otro día en tu diario de gente que señalaba que prefería que el capital fuera guipuzcoano. Si mañana invirtiéramos en la Real diez millones de euros procedentes de inversores guipuzcoanos, sin aportar gestión y nuevos mercados, sería como echar agua en el desierto. El pasivo estructural del club fagocita esos millones en menos de media temporada en Segunda División.

- ¿Entonces?

- Nosotros lo que pretendemos es dotar a la Real de una cuarta, e incluso una quinta vía. Abrir a la Real a mercados donde por las razones que sean en estos momentos está imposibilitada para acceder. Obviamente, contamos con una gran ventaja, y es que ya tenemos todo el trabajo hecho.

- ¿Y tantas fuentes de ingresos puede haber en China para la Real?

- Coincide que el próximo mes de agosto van a tener lugar los Juegos de Beijing y la Expo de Shanghai en 2010. Es lo que nos llevó a exponer a la Real nuestra idea, que ya teníamos por otra parte bastante avanzada y sopesada, al tiempo que contrastada con las autoridades locales y con nuestros socios en China. Nuestra idea sería canalizar el negocio de merchandising de la Real en Asia por medio de dos tiendas en los Duty Free de los aeropuertos de Beijing y Shanghai.

- ¿ Y tanto puede suponer eso?

- Lo importante es que en las camisetas se refleje Shanghai 2010 o Beijing 2008 de cara al flujo tan importante de gente que va a pasar por estos dos aeropuertos. Serían las dos únicas tiendas exclusivas de deporte en el Duty Free de esos aeropuertos. Pero hay más.

- Diga, diga.

- Estando la Real en Primera División -en Segunda es más difícil- nos permitiría negociar, además de con Mediapro aquí, con las autoridades chinas por considerarnos un equipo con cierto matiz chino, pero occidental, como sería el caso de la Real Sociedad. Por eso, los dos partidos contra el Madrid, el Barcelona, el Atlético de Madrid, el Sevilla y el Valencia serían televisados allí. En Segunda es más difícil, tendríamos que buscar un reclamo chino. Por eso pensamos en llamar Beijing 2008 Arena al Estadio de Anoeta hasta 2009 y posteriormente llamarle Expo Shanghai 2010 Arena. Podríamos obtener dinero de los organismos que están organizando estos dos acontecimientos, y que cuentan con una capacidad de inversión brutal en este momento.

- ¿Pero ustedes saben de fútbol?

- Independientemente de nuestra experiencia en el mundo del fútbol chino, hemos tenido la posibilidad de contrastar ideas con equipos ingleses que nos han pedido que les asesoremos en la entrada en China. Habremos estado con cerca de ochenta jugadores diferentes con sus correspondientes representantes. Todo ello nos ha dado una clara composición de lugar. Llevamos más de cinco años analizando el fútbol, como elemento de ocio, de deporte, pero por qué no decirlo también de negocio

- ¿Y cuánto tiempo llevan hablando con la Real?

- Con este Consejo hemos mantenido muchas reuniones, pero desde el principio vimos que era muy difícil llegar a acuerdos con ellos. Honestamente pensamos que el proyecto de la Real Sociedad desafortunadamente les sobrepasó en un primer momento y desde entonces han tenido la difícil tarea de ir a rebufo, sin ninguna capacidad para anticiparse a lo que les venía

-¿Hablaron con la Real en la anterior ampliación de capital?

- Por supuesto. Nuestra propuesta fue cubrir un 35% siempre y cuando se consiguiera una autorización del accionista para salvar el límite del 2%. Éste es un tema que nos causa cierto enfado porque nos gustaría aclarar que el planteamiento de comprar muchos 2% nunca fue sugerido por nosotros, y la prueba de que siempre quisimos claridad en ese tema es que nosotros nos limitamos a adquirir un paquete inferior al 2%. Yo particularmente que soy de aquí, tengo muy claro que debíamos ser muy meticulosos en ese tema.

- ¿Compraron acciones entonces?

- Sí. Exactamente quinientas, a nombre de una sociedad.

-¿...?

- Posteriormente seguimos teniendo conversaciones con ellos. El 17 de diciembre de 2006, en vista de la situación caótica en la que se encontraba el equipo, último con 16 partidos jugados, a 12 puntos de la salvación, nos decidimos a realizarles nuevamente la misma propuesta por escrito, y eso que el equipo se deterioraba por momentos. Entonces estábamos dispuestos a compartir el Consejo con ellos para ayudarles porque entendíamos que necesitaban un apoyo. El 22 de diciembre recibimos una respuesta muy cariñosa de Miguel Fuentes en la que lo único que nos ofrecía era una relación meramente comercial. Desde entonces han sido exquisitos con nosotros en el trato. Pero nada más.

- ¿ Y qué hicieron entonces?

- Seguimos con nuestro proyecto, haciéndolo más sólido, más grande, porque sabíamos que aquí, en la Real, había una metástasis clara que iba a terminar saliendo a la luz. En este Consejo hay gente muy maja, pero en el mundo del fútbol hay que saber desenvolverse en situaciones límite. Nosotros no sé si somos muy buenos o muy malos, pero desde luego creo que tenemos la cintura y la mano izquierda que el mundo del fútbol requiere.

- ¿Tienen un equipo preparado para hacerse cargo de la Real?

- Tenemos un buen equipo. No tengo dudas de que podemos enchufar a la Real a la fuente de ingresos que hay en Asia e incluso abrir una quinta vía de ingresos.

- Ustedes quieren una auditoría externa, pero ¿y si no se la dan?

- Hay varias maneras de afrontar esa situación. Lo primero es ver como discurre la Junta del 30 de noviembre. Si no se aprobara el presupuesto que presentan tienen dos opciones: dimitir o preparar otro nuevo y volverlo a presentar treinta días después. A partir de ese momento estamos barajando varias posibilidades. Vamos a esperar No podemos precipitarnos.

- ¿La situación deportiva va a influir a la hora de entrar o no en la Real?

- Claro. Si estamos a una distancia importante de los puestos de ascenso que haga que el riesgo de una inversión importante sea inasumible, tendremos que esperar más.

- ¿Esperar o retirarse?

- Retirarnos no. Nosotros seguiríamos trabajando en nuestro proyecto con tranquilidad y sosiego para el próximo año intentarlo con todas las de la ley. Lo que tenemos claro es que sin fuentes de ingreso adicionales la metástasis de la Real será irreversible el año que viene. Si el único objetivo es obtener beneficios por la venta de inmovilizado material, que al final es la llamada L de Zubieta, lo único que se consigue es dejar al club completamente desnudo y ya no habrá con qué afrontar otro año en Segunda División. La Real en ese caso estaría abocada a una Ley Concursal.

- El tiempo corre en su contra.

- Claro. El tema de la auditoría externa lleva un proceso que nos va a poner no en diciembre sino a mitad o finales de enero.

- ¿Y los ingresos de los Juegos de Pekín...?

- Nosotros tenemos de tiempo límite hasta finales de febrero. Si cogemos la Real antes de esa fecha nos da tiempo para hacer lo que queremos, pero habremos perdido el tren del mercado invernal de jugadores. Es obvio que en el mes de febrero la Real ya va a saber dónde está. De momento y, aunque el cuerpo nos pida otra cosa, vamos a seguir con paciencia, y cabeza fría. Sin dejar que otros nos marquen el paso. No nos vamos a salir de nuestra hoja de ruta. El Consejo quiere que salgamos a la luz porque les ha explotado el tema, pero nosotros llevamos tiempo con esto y lo vamos a seguir llevando como creemos que debe ser.