Eskerrikasko, Agur

Artículo de Xabier Albistur en la web de EAJ-PNV.

¿Tocaba irse?.Por razones de edad, salud, vigor físico y mental, entusiasmo, disposición, capacidad de trabajo y relación, sin duda no.¿Por renovación?.Es un eufemismo sostenido en oscuras razones. Si se ha ido el Presidente del EBB con quien me identifico y apoyo ¿qué motivaba que yo no tomara una decisión similar?. Ha tocado. Las razones personales las dejo para un dialogo privado. Paso a la política ciudadana con libertad, serenidad y satisfacción.

Llevo treinta y tres años vinculado al EAJ/PNV y treinta y uno de militante. He ocupado veintiocho años como cargo público en alguna Institución Vasca o del Estado, veintiuno de ellos por elección popular directa. No he perdido ni una elección a las que me he presentado e incluso con mi candidatura siempre se han mejorado posiciones. Tengo el doliente record de ser el último alcalde nacionalista de San Sebastián, aun habiendo ganado de nuevo las elecciones, y el satisfactorio de ser el senador más votado en toda la historia electoral del partido nacionalista vasco en Gipuzkoa.

He tenido la especial fortuna de haber contribuido al nacimiento y desarrollo de la administración autonómica y de la foral y de participar en la municipal. Intervenir en la negociación del Concierto y Cupo, defenderlos en la Cortes Generales, presidir una Caja de Ahorros. Haber preparado con el mejor de los equipos, humano y político, un Plan General para la Donostia del futuro y de hoy, con Miramón, Errotaburu, el Kursaal, Anoeta, etc.

Además resulta de particular orgullo haber aguantado hasta el último minuto para acordar la actual financiación de la Y vasca, introducir a Tecnalia en el Real Instituto Elcano, resolver la jubilación definitiva a los prejubilados de Telefónica y haber abierto las puertas de ministerios a ayuntamientos, empresarios, centros de investigación y ciudadanos vascos para obtener recursos y soluciones, necesarios para sus proyectos y sus problemas.

Este momento es el adecuado para reiterar mi fe en el EAJ/PNV. En el partido que en sus ciento doce años de existencia ha conseguido captar adhesiones, respeto de sus adversarios políticos, influencia en España y Europa, articular con instituciones eficientes la sociedad y la economía vasca y proporcionar calidad de vida y servicios para el desarrollo de los ciudadanos que vivimos en Euskadi.

Me identifico con y apoyo al PNV estratega, de objetivos claros y para todos, negociador incansable hasta el mejor pacto posible, inamovible en su convencimiento de reforzar las instituciones autonómicas, riguroso y eficaz en el ejercicio del gobierno de su pueblo y responsable en la gobernabilidad del Estado y del desarrollo de la Unión Europea.

Hoy este partido no está en "el partido".Sigue estando en la sociedad, en los simpatizantes, en los ciudadanos, en muchos militantes callados y desinformados pero no está en el interior del PNV.¿Se trata de una adecuación a los tiempos, de una renovación de personas, ideas y estrategias?.No, habría que hacerlo, pero estamos en otras cosas, en una lucha por el poder con el que condicionar la actividad e identidad política del partido. La renovación es para reforzar ese poder, no una respuesta a la sociedad con la que no se habla.

El Partido está en crisis soterrada pero manifiesta. La militancia calla y se inhibe, tampoco está informada y no se le pregunta. Si preguntas a los simpatizantes y votantes encuentras una coincidencia de respuestas mayoritarias con tres "d": desacuerdo, desconfianza y distanciamiento.

Considero positivo la acumulación de fuerzas nacionalistas. Pero con experiencias que tienen arraigo social y reconocimiento político por los antagonistas, como la coalición con EA, Con otros, el resultado es proporcionar presencia política a quien no tiene capacidad ni garantías de obtenerla con los votos. Con la izquierda radical, es una ensoñación, porque no saben o no quieren hacer política y cuando lo intentan como ANV en los ayuntamientos es para anular al PNV.

También reclamo para mi pueblo, para todo él, el derecho a decidir. Pero es necesario que lejos de incertidumbres, conceptos generales y calendarios, esta propuesta sea claramente un proyecto efectivo para la paz, un acuerdo político duradero, más que mayoritario, resultado de un largo diálogo entre las fuerzas políticas, que recoja además el sentir también, más que mayoritario, de los ciudadanos incluso antes de ser consultados y que resulte una relación fiable con el gobierno del Estado.

Pero mientras tanto hay una gestión política real que pide paso a bocinazos. Se nos presenta un gobierno tripartito como la formulación de las posiciones políticas más identificadas con Euskadi pero parte de sus miembros en las "decisiones a las que tenemos derecho" los guipuzcoanos actúan con oposición dura y directa ( tren de alta velocidad, puerto de Pasaia, aeropuerto, incineradora ) por no recordar los acuerdos antiPNV en diversos ayuntamientos del territorio.

Entiendo que la acción política debe conllevar firmeza. Firmeza en el razonamiento y en las convicciones. En nuestro caso, para manifestarla allá donde se pueden tomar decisiones que afectan a las condiciones sociales, económicas o políticas de Euskadi. Pero la firmeza debe ir acompañada de tolerancia, rigor e inteligencia. Manifestarse como nacionalista en casa es simple. Pero sostenerlo permanentemente en campo ajeno supone un ejercicio de dialogo, relación, de saber escuchar, de paciencia y de búsqueda de acuerdo. Al nacionalismo vasco, que representa el PNV hay oposición pero también amplio respeto. Siempre que sin renunciar a nuestros principios sepamos ser abiertos, solidarios, constructivos, convincentes en nuestros argumentos y fieles a lo acordado. Esta es la tradición del los parlamentarios vascos.
En estos cuatro años el PNV presidido por Imaz ha sido influyente, respetado y reconocido en la política española, por el gobierno y la oposición. De ahí los resultados positivos presupuestarios y legislativos obtenidos y las buenas relaciones, mejorables, entre los gobiernos. Con la partida del Presidente del EBB la pizarra vuelve a estar limpia y hay que empezar a escribir de nuevo, en un ejercicio de prudencia que eluda el riesgo de una confrontación perniciosa y estéril.

Aunque no esté al uso manifiesto que tenemos que convencer a España y con ella a Europa, pero como pueblo digno, creativo, inteligente, libre y solidario. Pero como políticos nacionalistas necesitamos renovar y confirmar, cada día, el convencimiento de nuestro propio pueblo en nuestro proyecto.

No quiero terminar sin mostrar mi apoyo y solidaridad con los compañeros políticos parlamentarios o no, que ejercen su actividad política escoltados. Continuaré desde donde esté trabajando para terminar con esta lacra para que todos podamos recuperar la libertad cotidiana.

A todos los que me manifestaron su reconocimiento, su apoyo, sus opiniones, sus problemas, su confianza, su compañía, su aprecio y su amistad