El PNV reafirma a Ibarretxe como valor de futuro y le erige en candidato a lehendakari

Ante su parroquia y en un día tan señalado para la familia jeltzale. El presidente del Euzkadi Buru Batzar del PNV, Iñigo Urkullu, desveló ayer en el Alderdi Eguna el secreto mejor guardado estos días sobre el futuro político de Juan José Ibarretxe. Finalmente, repetirá, por cuarta vez, como candidato a lehendakari las próximas elecciones autonómicas de marzo.

La formación jeltzale se coloca de esta manera en las marcas de salida de la carrera electoral que le enfrentará a un PSE crecido tras los resultados cosechados en los pasados comicios generales en los que los socialistas de la CAV registraron un apoyo por encima del recibido por el PNV, si bien se trataba de unas generales y con la bipolaridad Zapatero-Rajoy como factor determinante.

Con el anuncio de su candidato a lehendakari y el relato de Urkullu de los pilares que sustentará el mensaje del partido en los próximos meses, la formación abertzale se mete de lleno y con todas sus cartas sobre la mesa en el cuerpo a cuerpo preelectoral para cortar de plano la creciente acometida de los socialistas y mantener la presidencia del Gobierno Vasco una legislatura más.

En las últimas semanas, Urkullu ya venía dando señales de que Ibarretxe repetiría como candidato, pese a que no terminaba de hacerlo oficial. En diferentes foros e intervenciones públicas, incluso en su blog personal, el líder jeltzale no sólo marcó los retos que debería encarar su candidato a lehendakari la próxima legislatura, también insinuaba la idoneidad de Ibarretxe dada la coyuntura política actual y la propia situación interna del partido y avisó a algunos medios de comunicación que "la realidad no arruine un buen titular" . El propio Ibarretxe señaló el pasado día 17 en la entrega de los Premios Korta que se encontraba "lleno de energía e ilusión" ante la posibilidad de optar a la reelección, ante lo que Urkullu señaló tres día después que las palabras de Ibarretxe son una "señal de liderazgo".

Así las cosas, primero esperó a que el EBB refrendará la decisión -lo hizo en su reunión ordinaria del pasado lunes día 22- y, posteriormente, aguardó el momento oportuno para anunciarlo en casa , ante los suyos. Para la ejecutiva jeltzale, Ibarretxe representa "el compromiso de futuro, desarrollo, bienestar y autogobierno" y es un político que sabe "atajar una crisis económica y de aglutinar una mayoría de vascos y vascas detrás de nuestro proyecto".

Pese a que no pilló por sorpresa a nadie, el anuncio fue un golpe de efecto en un momento en el que la oposición ha recrudecido su ofensiva para deslegitimar, cuando no desacreditar, al lehendakari y dar por agotada su andadura, especialmente por su apuesta por la consulta. La designación de Ibarretxe fue recibida con gran efervescencia por la multitud que en gran número -algunas fuentes cifran en 100.000 simpatizantes- se dio cita en las campas de Foronda para celebrar el trigésimo primer Alderdi Eguna. Ya durante su intervención los vítores de apoyo - "ari, ari, ari... Ibarretxe lehendakari"- interrumpieron su alocución en varias ocasiones, pero el posterior anuncio de Urkullu desató el júbilo entre los asistentes.

El tirón popular de Ibarretxe quedó patente una vez más durante la jornada de ayer y, más allá de los argumentos y mensajes electorales ayer prefijados, le convierten en la principal baza electoral de su partido de cara a las autonómicas.

proceso de designación Ibarretxe será, pues, el candidato oficial que el partido propondrá a las bases para que éstas lo refrenden. El proceso de designación se abrirá en breve y se prolongará hasta noviembre y durante el mismo los afiliados pueden refrendar al candidato propuesto por la ejecutiva nacional o proponer otros nuevos que serían votados en una segunda votación, siempre y cuando cuenten con el apoyo de más de dos agrupaciones locales.

En cualquier caso, parece difícil que a Ibarretxe le salgan rivales a la luz de la popularidad con la que goza entre las filas jeltzales y, sobre todo, porque el partido liderado por Urkullu -que ayer afrontaba su primer Alderdi como líder del partido- ha realizado desde la marcha de Josu Jon Imaz un ímprobo trabajo de cohesión interna para limar asperezas y presentarse como un partido unido, fuerte y con un proyecto nítido y compartido por todos los militantes. Durante su intervención de ayer, el presidente del PNV hizo hincapié en la unidad del partido como premisa para recuperar el "pulso interno".