Basagoiti desvincula el cambio en Álava del apoyo inmediato al Gobierno Vasco

La polémica suscitada a raíz del trasvase de la Diputación Foral de Álava no empañó ayer el afectuoso encuentro que Patxi López y Antonio Basagoiti mantuvieron en la sede socialista. Ambos negaron que este asunto formara parte de los contenidos abordados durante la reunión, aunque frente a la escueta negativa del secretario general del PSE, el líder de los populares vascos añadió que la moción de censura para desbancar a la formación jeltzale de la entidad foral estará presente en las conversaciones que los mismos protagonistas de ayer mantendrán en los próximos días.

Dos días después de que el secretario general del PP en Álava, Javier de Andrés, aclarara que los socialistas "difícilmente conseguirán acuerdos en el Parlamento" con su partido si no se suman a la tentativa popular , Basagoiti respaldó las palabras de su compañero de formación y destacó que está de acuerdo con "todo lo que dice", aunque, en un tono más conciliador que el portavoz en las Juntas Generales alavesas, reiteró su disposición a dar su apoyo al futuro Gobierno Vasco.

Si ambos partidos suman sus fuerzas -PP dispone de 15 junteros y el PSE de 14 sobre un total de 51- desbancarían al jeltzale Xabier Agirre del sillón foral, pero el desalojo incluiría a Aralar y Eusko Alkartasuna, socios del Gabinete provincial. Desde EA ven factible la consecución de este acuerdo, lo que acarrearía una moción de censura para la que no ven ninguna razón relacionada con la gestión del Gobierno foral, sino únicamente motivos "políticos" cimentados en el intento del PP de instaurar en todas las instituciones vascas, "con la connivencia del PSE, el frente nacionalista español".

El secretario general de EA en este territorio, Lauren Uria, auguró que los socialistas encontrarán serias dificultades a la hora de explicar a la sociedad alavesa su apoyo al PP, sobre todo, después de que hace tres años argumentaran su negativa a "convulsionar" Álava al rechazar la moción de censura presentada contra el entonces diputado general, Ramón Rabanera. Y en el repaso a otro episodio entre ambos partidos, el compañero de Uria en la Cámara alavesa y portavoz de la Ejecutiva territorial, Patxi Martínez de Albéniz, recordó que el PSE vio razones para dejar fuera de la Caja Vital al PP, lo que, en su opinión, supondría una contradicción el que ahora le "entregase" la Diputación.

La formación abertzale está convencida de que el objetivo del cambio se ciñe a un mero "quítate tú para ponerme yo" que acabará en "bronca y pelea" entre los dos partidos constitucionalistas; un escenario de especial gravedad, en opinión de Uria, que está generando "zozobra en incertidumbre cuando la sociedad quiere seguridad ante la crisis". Aún así, recordaron que, de momento, el PSE sigue siendo interlocutor preferente del Gobierno foral, tal y como acordaron al inicio de la legislatura.