Habrá pacto con EA

Ayer se reunió la asamblea regional de EA y se dió luz verde al pacto con el PNV en Gipuzkoa para conformar el próximo Gobierno foral, con lo que queda descartada la posibilidad de buscar un acuerdo con el PSE. Conocida la postura del partido que preside Iñaki Galdos en este territorio, los socialistas se aplicarán a fondo para buscar un pacto alternativo al eje PNV-EA o al menos a captar votos para lograr la investidura de Miguel Buen durante el pleno del viernes, en el que se designará al próximo diputado general.

Un centenar de militantes de EA participaron ayer en la Asamblea Regional celebrada en un céntrico hotel donostiarra. En el encuentro, la Ejecutiva territorial del partido detalló el estado de las conversaciones con el PNV y comunicó su preferencia por cerrar un pacto de gobierno con este partido, aun a costa de descartar la jugosa oferta que realizó a la formación el PSE, que le propuso gestionar la mitad de las carteras de la Diputación.

Escuchadas las explicaciones de Galdos, los participantes en la Asamblea cerraron filas en torno a la apuesta por cerrar un acuerdo con los jeltzales. Sólo dos personas plantearon alguna objeción.

Una vez conocido el veredicto de la Asamblea Regional, EA tratará de resolver hoy mismo los últimos asuntos pendientes con el PNV. La decisión no tiene marcha atrás pero hay flecos que arreglar. "Tendría que pasar una hecatombe para que nuestra apuesta por el PNV cambiara", aseguraron ayer fuentes cercanas a la negociación, que auguraron que hoy se "desatarán todos los nudos". "No vamos a llegar el viernes a la elección de diputado general con cosas sin atar, como pasó la última vez", declararon.

El último escollo sigue siendo las diferentes posturas de ambos partidos respecto al Impuesto de Sociedades. Por lo demás, según EA, el PNV ha admitido "casi en su integridad" las ocho exigencias del partido, entre ellas la cesión de la dirección de Hacienda, el cambio del sistema de adjudicación de las obras, la presencia de todos los partidos en organismos como la sociedad de infraestructuras Bidegi o la obligación de todos los cargos de la próxima Diputación de hacer una declaración de todos sus bienes al tomar posesión de ellos y al abandonarlos. "Le pedimos garantías de transparencia y el PNV nos las ha dado", concluyeron.

Lo que parece definitivamente frustrado es el deseo del PNV de conformar un cuatripartito en el que, además de EA, también esté presente EB-Aralar. En la segunda reunión mantenida ayer por las cuatro formaciones, tanto EA como los socios de la coalición confirmaron que son más los proyectos que les separan que los que les unen.

Rebeka Ubera, juntera de Aralar, explicó que tras la cita de ayer la negociación quedó en una situación de "impasse", ya que el acuerdo no ha quedado descartado, pero tampoco percibieron la "disposición a ser más flexibles" que reivindicaban en temas que consideran fundamentales a la hora de conformar gobierno. "Hemos puesto diferentes alternativas encima de la mesa. Esta actitud constructiva no la hemos visto por parte de PNV y EA. No ha habido intención de dar pasos para acercarse a nuestras posturas", dijo Ubera, quien insistió en que la coalición continúa apostando por "un gobierno abertzale y con contenidos de izquierda".

Los votos de EB-Aralar, y en concreto los de los cuatro junteros de EB, son clave para la designación del próximo diputado general. Su apoyo al PNV permitiría el nombramiento de Markel Olano con mayoría absoluta y su abstención también auparía al jeltzale, aunque con mayoría simple. Pero lo que más preocupa a la entente PNV-EA es que el PSE-EE ofrezca al partido que dirige Javier Madrazo y al PP una tentadora oferta que les haga inclinarse finalmente por Miguel Buen, lo que rompería 30 años de hegemonía nacionalista en la Diputación de Gipuzkoa.

Markel Olano, no obstante, confiababa ayer en verse investido el viernes diputado general en minoría con el apoyo de EA, a la que ha garantizado la dirección de Hacienda. Aunque reconoció que ve lejano un acuerdo de similar calado con EB-Aralar, aseguró que la negociación "sigue abierta" y que, aunque no lleguen a cerrar un pacto con la coalición esta semana, seráuna formación de referencia a la hora de recabar apoyos a lo largo de la nueva legislatura.

"Que gobernemos de la mano de EA no significa que en Juntas Generales no tengamos que planear un proceso de conversación con todos los grupos políticos, haciendo una especial incidencia con la coalición con la que tenemos que mantener una conversación permanente para llegar a acuerdos", aseguró, tras asististir al tradicional pleno intinerante de las Juntas Generales de Gipuzkoa, que este año tuvo lugar en Getaria.

Buen, que también asistió a este acto, ya auguraba por la mañana la opción por la que se decantaría la Asamblea Regional de EA horas más tarde. Aunque lamentó que los nacionalistas olviden el respeto a la lista más votada que reivindican en otros ámbitos, aseguró que esta decisión no le hará desistir en su intento de ser el próximo presidente foral. Hoy mismo adelantará los pasos que prevé dar en una rueda de prensa que tiene previsto celebrar en la sede del PSE.